Manuel Neila y el secreto de lo aún no dicho




José Ramón González.- Para un observador externo y distanciado, la práctica de la escritura aforística se ofrece como un ejercicio de exploración y descubrimiento que tiene en el hallazgo verbal y en la iluminación que lo acompaña (o lo precede) el feliz cumplimiento de su destino como género de discurso. Instalado en la realidad, el escritor de aforismos se sumerge en su conciencia más recóndita, profundiza en su mundo interior y busca en el fondo de sí mismo; pero sondea también el territorio que le rodea, atento a las contradicciones de una realidad múltiple cuyo sentido o sinsentido se desvela en el encuentro con los otros (en la participación en eso que los antiguos llamaron el teatro del mundo) y en la constatación de los límites que el universo de lo objetivo impone al ser humano. El aforista dispone los instrumentos con los que cuestiona, ausculta e indaga en la realidad ‒perspicacia, sutileza, sagacidad, inocencia, malicia, indignación, rabia, humor, ironía…‒ y espera con tenaz paciencia el momento en el que emerja en el lenguaje una verdad suficiente. No la Verdad con mayúsculas sino una evidencia contingente y precaria que, sin embargo, se revela como necesaria, viva ‒y muy real‒ en el momento de la escritura y de la lectura. Siempre he pensado que en el escritor de aforismos sobrevive la condición auroral de la conciencia infantil, para la que el comercio con la realidad es una incesante suma de revelaciones que iluminan, deleitan, escandalizan u horrorizan, pero que nunca dejan indiferente (todo se presenta ante el niño con el encanto de lo nuevo y lo visto por primera vez).

Manuel Neila nos arrastra con sus palabras hábilmente trenzadas (llegadas a él como don o regalo misterioso, pero también como resultado de un intenso trabajo interior) y nos entrega un puñado de verdades secretas (es el secreto de lo aún no dicho) que se desnudan de golpe en la lectura o se insinúan en una sutil gradación de facetas y matices que no admite una clausura definitiva. Gran conocedor de la tradición aforística, el autor opta siempre por una dicción sobria, equilibrada, bien medida, que tiene el encanto de la máxima clásica y de la de los moralistas franceses y alemanes, y que rehuye, sin perder un ápice de su eficacia y su contundencia, la teatralidad de la revelación espectacular y el fogonazo fingido que muy a menudo sirve únicamente para deslumbrar al lector y ocultar el vacío y la inanidad del pensamiento que la nutre (esa luz hiriente que vela la mirada e impide por un momento descubrir que detrás de ella no hay nada de verdadero interés). Neila sorprende al lector, le obliga a adoptar el ángulo del discordante, pero no juega a la sorpresa gratuita. El suyo es un decir sereno, que elude lo pretencioso y lo excesivamente solemne, y que, dentro de su brevedad, deja a la vista los pliegues y repliegues de un pensamiento en acción. En este sentido, no es casual que escaseen en su obra los aforismos de brevedad máxima y, sin embargo, abunden aquellos que incorporan en su interior un doble ‒e incluso un triple‒ movimiento/momento del pensar.

Manuel Neila ha demostrado que es capaz de abordar los más variados asuntos –filosóficos o cognitivos, morales o éticos, literarios o estéticos‒ con originalidad y frescura, y la lectura de sus aforismos ensancha nuestra mirada a la realidad social y a nuestra propia condición como seres pensantes, luminosos, frágiles, contradictorios, incoherentes, lúcidos, misteriosos, miserables, generosos, abyectos o sublimes, temerosos o temibles… pero siempre humanos (excesiva y felizmente humanos).

(Fragmento del prólogo a M. Neila, Discordancias. Antología esencial. Libros al Albur, Sevilla, 2019, colección Sénior).




Se publica el primer Anuario del Aforismo Español

Apeadero de Aforistas publica el primer Anuario del Aforismo Español, destinado a reunir en un único volumen textos de creación y reflexión sobre el género más breve. Con ello, Apeadero de Aforistas trata de dotar al género más breve en España de una herramienta útil para el debate y el estudio. Incluye aforismos inéditos, reseñas de los libros más relevantes publicados durante el año y artículos de análisis. Escriben, entre otros, Ramón Andrés, Carmen Canet, José Mateos, Carmen Camacho, Manuel Neila, Eliana Dukelsky, Gemma Pellicer, Ander Mayora o Felix Trull.

Dionisia García: comprender mejor el mundo

Dionisia García escribe para comprender mejor el mundo y poder pararse a valorar las cosas elementales de la vida que, a veces, desatendemos. Estas son las intenciones que tienen las palabras que la autora reúne en estos aforismos que son búsquedas, primores de lo cotidiano que olvidamos y que ella con su sabiduría, sensibilidad, más el bagaje que dan los años, nos entrega generosamente. Con un estilo claro, humor fino y elegante, con un lenguaje sencillo y humano envuelto en poesía, sus frases nos sorprenden porque elevan lo cotidiano y lo elemental como una cometa que puede llegar a lo más alto.

Aforismo y pensamiento: una aproximación

El aforismo, que antaño sintetizaba las grandes verdades en un formato lapidario y contundente, se aviene en el siglo XXI a entremezclarse con la nota lírica, con la divagación, con el apunte irónico. Ya no admite el tono campanudo de otras épocas, tal vez más ingenuas. Sabemos demasiado como para seguir haciéndonos trampas al solitario. Quisimos ser como dioses, y nos hemos descubierto aprendices de bufón. A duras penas podemos tomarnos a nosotros mismos en serio. Ahora, pensar se limita a registrar nuestra propia impotencia, bajo el aspecto de verdades raudas, provisionales.

Defensa de los libros de aforismos (y de los aforismos en libro)

¿Pierde algo el aforismo, en cuanto manifestación literaria, con su proliferación actual, ajena al formato libro (p. ej., redes sociales)? ¿Está el género más breve condenado a sobrevivir en un rincón, sin relevancia, sin densidad, flotando en el ambiente, confundido entre eslóganes publicitarios y consignas políticas, cívicas y sociales? En este texto se reflexiona sobre la necesidad que tiene el aforismo, y el lector de aforismos, del formato libro para poder alcanzar la profundidad que requiere y que merece.

Se da a conocer el veredicto de los Premios AdA de Aforismo

En su afán de promover el mejor conocimiento del aforismo español contemporáneo, en todas sus facetas, Apeadero de Aforistas promueve los primeros Premios AdA de Aforismo, correspondientes a los títulos editados durante 2018. Estos premios no tienen dotación económica y su propósito no es otro que el de llamar la atención del público lector sobre ciertas obras y autores que, en opinión del jurado, han destacado por su calidad a lo largo del año anterior. El veredicto fue dado a conocer en el curso de la Jornada Nacional de Aforistas, celebrada el sábado, 30 de marzo de 2019, programada dentro de los actos de la Semana del Aforismo de Sevilla. El acto tuvo lugar en el salón de actos de la Biblioteca Pública de la capital andaluza.

El Aforista abre un canal propio en YouTube

Con el propósito de compartir con autores y lectores de aforismos aquellos materiales de carácter no estrictamente textual (conferencias, debates, presentaciones de libros, lecturas), El Aforista ha abierto un canal en You Tube al que vamos a subir, con regularidad, vídeos y audios acerca del género más breve. Os invitamos a conocerlo.

Caosmos: ¿cómo se organiza un libro de aforismos?

La cuestión de cómo organizar un libro de aforismos (cuya génesis suele ser azarosa e incluso caótica, al ritmo de la ocurrencia y la inspiración) está cobrando, con la maduración del género, una urgencia insoslayable. Si, hasta fechas recientes, el lector acogía con gusto -e incluso con cierto alivio- la relativa informalidad con que se sucedían los aforismos en los volúmenes al uso, lo cual les otorgaba la apariencia de cuaderno de notas o diario al vuelo, la proliferación de títulos aforísticos que se ha venido produciendo en los últimos años amenaza con saturarle ante el aluvión de frases inconexas y sugerencias sin hilación aparente entre sí.

Los aforistas y la paternidad

¿Qué queda de la paternidad en el siglo XXI? ¿Hay todavía hombres que la vivan como un hecho gozoso y crucial de sus existencias, incluso como una suerte de “bautismo” personal? Con el objetivo de aportar alguna luz a este asunto, capital en la vida de todo hombre, Libros al Albur ha invitado a varios aforistas a aportar sus textos donde dejan constancia de su experiencia personal al respecto, lo cual ha dado como fruto Fili Mei. Los aforistas y Dios, una antología que verá la luz en breve. Publicamos un breve adelanto en exclusiva.

Más allá de la brevedad

El aforismo es el género más breve, de eso no cabe ninguna duda. Sin embargo, cuanto más vueltas le doy a esta evidencia material, más tiendo a revisar las bases sobre las que se funda. Aunque resulta irrebatible que el aforismo logra plasmar una idea de forma sumamente eficiente, empleando el menor número de recursos, no me parece que sea esa la condición suficiente para tildar de aforística una frase cualquiera.

Enciclopedia de libros españoles de aforismos

Inauguramos nueva sección, en la que vamos a empezar a recopilar los mejores aforismos de los libros escritos por autores nacidos o residentes en España, y publicados en nuestro país a partir del año 2010 en adelante. Lo hacemos para reunir en un único espacio virtual la más ingente cantidad de información posible sobre este tema, a modo de "enciclopedia" para su consulta por parte de cualquier interesado o estudioso en el futuro. Las primera obras que incorporamos son los libros de Carlos Marzal, Ana Pérez Cañamares, Manuel Neila, Victoria León, José Luis Morante, Ander Mayora, Jordi Doce, Dionisia García, Fernando Menéndez, Erika Martínez, Felix Trull, José Antonio Santano, Emilio López Medina, Carmen Canet, José Ángel Cilleruelo, Pedro Roso, Antonio Rivero Taravillo, Miguel Ángel Arcas, Gabriel Insausti y Mario Pérez Antolín, entre otros.

Ética del aforismo

En las distintas disecciones que ha sufrido el género aforístico en los últimos tiempos, son preferentes aquellas que lo abordan desde una perspectiva filológica, tratando de precisar sus contornos formales (más allá de los cuales cambiaría de nombre), o bien filosófica, atendiendo a sus principios epistemológicos, de captura necesariamente fugaz de una realidad siempre cambiante. Personalmente, echo de menos prestar mayor atención a una dimensión que escapa tanto a uno como a otro abordaje teórico, y es el que atañe a la ética del aforismo. En este artículo, se trata de acometer dicho abordaje para delinear una posible moralidad subyacente a la elección de la brevedad como forma de expresión literaria.

El aforismo ante el espejo

Toda acometida teórica sobre el aforismo corre el riesgo de asfixiar lo que éste posee de más genuino, justamente: su lacónica e indómita polisemia. Tal vez del aforismo sólo pueda dar cuenta veraz, leal y confiable... otro aforismo. En esta brevísima antología recogemos algunos de los "metaforismos" (o aforismos al cuadrado) que hemos espigado de entre los libros publicados por autores españoles vivos en los últimos años.

De poetas (a) aforistas

El Aforista comienza una ronda de entrevistas con poetas que, en algún momento, se sintieron atraídos por el género más breve y empezaron a escribir aforismos hasta incorporarlos a su quehacer cotidiano. Empezamos con Ana Pérez Cañamares, León Molina, Raquel Vázquez, Karlos Linazasoro, Miguel Cobo Rosa, José Luis Morante y Erika Martínez.